¿El agua de tu piscina se ha vuelto turbia? Es un problema muy común que debe ser ser solucionado, pues la turbidez del agua indica que esta no se encuentra en las mejores condiciones posibles. Pero, ¿A qué se debe que el agua se vuelta turbia? Si el agua de nuestra piscina se vuelve turbia es porque existen partículas en suspensión en el agua que, por algún motivo, no han sido retenidas por el filtro. Estas partículas pueden proceder del polvo del ambiente, de restos orgánicos, de insectos, restos de protección y cremas solares, etc...

Otro factor que también puede provocar que el agua se vuelta turbia es el pH. Este parámetro nos indica el nivel de acidez del agua. En este caso, si tenemos el agua turbia es porque el nivel de pH es alto y está por encima de los niveles recomendados (7,2 y 7,6). Hay que recordar que el nivel de pH debe estar siempre entre los niveles correctos, ya que de no ser así el agua podría causar irritaciones en nuestra piel.

La turbidez también puede deberse a otros factores como el poco uso de la depuradora o a que la arena del filtro necesita un cambio. Es por eso que debemos utilizar la depuradora con frecuencia y asegurarnos de que realiza su trabajo con eficacia.

Sea cual sea el motivo, si el agua de nuestra piscina está turbia debemos tratarla cuanto antes, ya que la turbidez es un claro indicativo de que el agua no se encuentra en las mejores condiciones posibles para el baño. ¿Cómo podemos hacerlo? Aquí os contamos algunos pasos que podéis seguir para eliminar la turbidez del agua de vuestra piscina.

Limpia bien tu piscina: Es un aspecto fundamental. Debemos limpiar bien la superficie del agua para eliminar todos los sedimentos que se hayan podido depositar sobre ella como polvo, insectos o cualquier tipo de residuos orgánicos. Para realizar esta labor podemos utilizar un instrumento muy útil como el sacahojas. También sería conveniente revisar el cesto del skimmer para comprobar que no está sucio.

Comprobar los niveles de cloro y pH: Una vez dejemos completamente limpia la superficie de nuestra piscina debemos revistar que tanto los niveles de cloro como de pH estén correctos. Si no lo están debemos regularlos, pues si el cloro y el pH están en niveles altos o bajos el agua podría causarnos irritaciones en la piel.

El tiempo de uso de la depuradora: Debemos programar la depuradora para que esta realice su función cada día y además lo haga con eficacia. Es importante aquí comprobar que nuestra depuradora se encuentra en perfecto estado y realizar su función correctamente.

Los filtros: Es conveniente revisarlos y limpiarlos con frecuencia, sobre todo en verano. En esta época del año suele haber más suciedad dentro de la piscina, por eso el filtro debe estar siempre limpio y en perfectas condiciones.

Si sigues estos consejos conseguirás eliminar la turbidez del agua de tu piscina. Pero si aún no tienes piscina en Poliéster Eurosur tenemos la solución. Somos expertos en la fabricación de piscinas de poliéster. Este tipo de piscinas son mucho más económicas que las piscinas de construcción y su instalación es más sencilla. Contacta con nosotros y pide tu presupuesto sin compromiso.